En un horizonte de alquitrán, tres fantoches de uniforme llevan su casa a cuestas como trinchera. Baliza por baliza y siguiendo la hoja de ruta estipulada, se dirigen inexorablemente al ansiado permiso que les corresponde tras cumplir su servicio militar. Vacaciones con pulsera. Pero la operación “Tormenta en el desierto” no ha terminado aún. Antes de llegar a su destino a la orilla del mar, el destacamento hace una parada estratégica bajo la luz… eléctrica… de la última baliza.
El Gran Crucero de David Mena es una de las primeras obras de este autor, una pieza dramática en tono de comedia en la que predomina la idea de objetualización del personaje, y en la que, irónicamente, “el Gran Crucero” se constituye en sueño obligatorio y colectivo de esperanza: el de la devolución de todo el esfuerzo realizado para obtener la prosperidad.
La obra fue estrenada bajo la dirección del propio David Mena como primera pieza de la compañía “La pescadería ambulante” en 2018 en el Teatro Cánovas de Málaga.